De algunos Periódicos en el estado de Sinaloa ayer y hoy; de los movimientos sociales de ayer y hoy. (1968 y 2012)
Las palabras son sin lugar a
dudas uno de los misterios más grandes de la humanidad. La capacidad que
tenemos de descifrar los símbolos que aparecen frente a nosotros día a día no es cualquier
cosa. No pocas han sido las veces que he quedado absorto en la contemplación de
una sola letra, preguntándome ¿Qué es ésto?, Pareciera que lo humano me fuera
ajeno…
Dentro de esta contemplación es
que he pensado en los efectos maravillosos del significante. ¿Cómo es que nos podemos
enamorar con palabras? ¿Cómo es que podemos enardecer con un discurso? ¿Cómo es
que podemos ser afectados por un sonido, por una imagen, por una intuición de
esa naturaleza de tal forma que lleguemos algunas veces al límite de la locura?
Por supuesto que no tengo las
respuestas a esas interrogantes, solo tengo algunas frases enigmáticas para
referirme a tan profundo misterio. Misterio que se normaliza en la
cotidianeidad, en la experiencia continua que tenemos con él día a día puesto
que no hay momento en que, a partir de que adquirimos la palabra, el verbo no
toque nuestra carne[1].
Esa capacidad del significante de tocar nuestra carne es la cúspide del enigma.
Es, en palabras de Cassirer Ernst[2], "la propiedad mágica de la palabra"; esa capacidad del símbolo de inducirnos a
estados anímicos, de amordazar nuestras vísceras y estimular nuestros hígados sigue
sorprendiendo a no pocos filósofos, psicólogos, psicoanalistas y lingüistas a pesar de ser, como experiencia, algo de lo
más común.
Los efectos de la palabra son
evidentes de forma más clara, más obvia, en la poesía y la retórica. Sin
embargo dichos efectos emanan no solamente de ejercicios tan retocados, las
capacidades del símbolo son puestas en acción, dentro de la polis, a cada momento, en todo lugar; miles
de señales nos ubican dentro de ese contexto, nos inducen a emociones. Nos
impulsan, con sus insinuaciones, a actuar de cierta manera y, sobre todo, nos
plantean el mundo de determinada forma.
Decir que nos planteamos el mundo
a través de esas señales es reconocer que nuestra percepción de las cosas se
encuentra mediada por un discurso. Es en esta mediación donde se sitúa la
ideología y es ahí mismo donde se encuentra algo más sutil, una persuasión
que es la voluntad de un otro que se manifiesta en quien a cedido a la seducción del discurso persuasor. Decimos la voluntad-del-otro en tanto esa voluntad
es, de hecho, la intencionalidad que un sujeto posee de instaurar cierta representación
del mundo en nuestro pensamiento. Esa intencionalidad puede llevar todo tipo de
intereses; el contenido de los discursos nos podría dar un indicio de ellos.
¿Cuántos son los medios de
comunicación que tratan –con diferentes herramientas, unas más finas, otras más
toscas- de implantar en nuestros pensamientos alguna concepción del mundo?
Podemos asegurar que… todos.
No obstante, en este breve texto
nos ocuparemos de uno que a trascendido por el tristemente celebre papel que ha
jugado en ciertos momentos, de enorme importancia, que han acontecido a lo
largo de la historia de nuestro país; estamos hablando del periódico.
Y de estos “ciertos momentos”
solo nos ocuparemos -a riesgo de decepcionar hondamente a nuestro lector por
tan breve información- de los que acaecieron en Sinaloa y en el Distrito
Federal durante los días uno, dos y tres de Octubre de 1968, así como de sucesos
recientes relacionados con el movimiento #YoSoy132 de Los Mochis. Situando
geográficamente el problema a tratar así como los objetos a los que nos
referiremos podemos inferir que uno de los medios sobre los que hablaremos es,
por supuesto, el periódico El Debate. De igual manera haremos referencia a “El
Diario de Culiacán”, específicamente a los ejemplares de los días mencionados arriba.
La importancia de referirnos a
ambos periódicos, en diferentes momentos y en relación a temas inherentes a los
movimientos estudiantiles de México se encuentra en realizar una observación
comparativa del discurso de la prensa escrita en aquellos años y el discurso de
ese medio de comunicación en el presente, así como poner en tela de juicio (amparados
en el código de ética de los comunicadores de la International Association of
Bussines Comunicators, así como en el código deontológico de los periodistas
sindicalizados de Madrid) el papel que han jugado durante los sucesos presentes
y pasados de los que hablamos anteriormente.
Los datos que aquí presentamos
fueron tomados de la hemeroteca del Archivo Histórico del Estado, con sede en
Culiacán Sinaloa.
Para dar inicio a nuestras
observaciones presentamos una serie de fotografías de diversas notas que fueron
expuestas en el periódico El Diario de Culiacán durante diferentes fechas del
año 1968, los temas que fueron tratados en esas notas giraron en torno a la
huelga estudiantil de la Universidad Autónoma de Sinaloa, al movimiento
estudiantil (y hasta popular) nacional del 68 y al IV informe de gobierno del entonces presidente de la República Gustavo Díaz Ordaz.
El objetivo de esto es sobre todo
evidenciar la semántica de las notas y el uso que los medios emplearon de la “propiedad
mágica de la palabra”, así como de las imágenes, para influir de forma poco ética en la percepción de las
personas que fueron contemporáneas de dichos movimientos y mostrar lo que, para muchísimas personas -pero no para todas y en eso nada de malo, en el sentido estricto de la palabra, hay-, es sumamente obvio: que existe una continuidad en dichas prácticas poco (o para nada) éticas que la prensa lleva a cabo.
Bajo la fotografía se puede apreciar el comentario del periodista: "Sonrientes, como si realizaran la gran tarea, los jóvenes estudiantes de la UAS montan guardia en el edificio central de la Universidad.- Arriba la "barricada" de muebles para impedir el paso de los que quieren estudiar.-
Ese es el mensaje, y las implicaciones que consigo trae son bastante sutiles pero sumamente claras; se trata de despolitizar los problemas institucionales, hacer a un lado la cuestión de las crisis que tuvo nuestra Universidad a lo largo de su historia y que fueron provocadas -muchas veces, más no todas- por la injerencia de las autoridades gubernamentales en los asuntos internos de la UAS. Es decir, en aquellos años la lucha estudiantil en nuestro estado abogaba por una verdadera autonomía universitaria, con demandas concretas que se referían a una reforma de la ley orgánica de la universidad que diera como resultado la eliminación de la Junta de Gobierno, instancia que al interior de la máxima casa de estudios del Estado se desempeñaba bajo absoluta influencia del Gobernador y que determinaba la vida institucional de la UAS. Sin embargo el papel desempeñado por la prensa del periódico al que nos referimos en este momento es ya clásico; todo un ejemplar de los medios de comunicación al servicio de los intereses de la oligarquía.
El periodista procede de manera un tanto chusca, con frases claras, con un lenguaje cotidiano que nos remite no a las condiciones estructurales que dan lugar a los problemas sociales como el que observamos en la nota, sino a las características personales de los sujetos implicados. Cambiemos de registro, dice implícitamente la nota, refirámonos a los muchachos en su condición personal como factor causal de los problemas observados, no a las condiciones políticas. "Si hay huelga es que los muchachos deben ser perezosos", "No les gusta estudiar, pretextos les sobran para cada huelga", "Dejen estudiar a esos muchachitos de bien que con hartas ganas van a la Universidad a educarse para la vida no como ustedes chamacos pachangueros que solo saben pasársela bien". Y el periodista, con la perspicacia que hemos de reconocerle, aprovecha brillantemente cada imagen que le ayude en su cometido. Hemos sido testigos, en estos tiempos, de esas habilidades periodísticas de las que aquí hablamos.
Observemos algunos ejemplos contemporáneos:
La fotografía mostrada, tomada de la Página oficial de el periódico El Debate, fue utilizada en una nota que reportaba la toma de las casetas de cobro "San Miguel" de la autopista internacional número 15 por parte de integrantes del Movimiento #YoSoy132LosMochis. Curiosamente el encabezado de la nota decía "Jóvenes Bloquean caseta de San Miguel". Con una clara intención de denostación, el autor de la nota realiza la mezcla de "cierta" semántica con mentira gráfica: podemos ver en la imagen mostrada arriba una considerable fila de automóviles y trailers esperando pasar por la caseta durante una soleada tarde. Sin embargo, los acontecimientos no fueron ni en ese momento de la tarde, ni en un día soleado: El Domingo 2 de Septiembre, alrededor de las 12 P.M, con las nubes cubriendo el cielo en el espacio geográfico que va de Los Mochis a San Miguel, los jóvenes tomaron las casetas de cobro, PERO, no para bloquearlas, sino para liberar a los conductores del cobro necesario para transitar por esa parte de la autopista.
¿Hubo colas de automoviles durante la toma de casetas? decimos contundentemente ¡NO! Entonces ¿Porqué utilizar una foto tomada de otro acontecimiento para ilustrar los hechos ocurridos el 2 de Septiembre? ¿Cuál es el efecto deseado por El Debate? ¿A qué intereses obedece la búsqueda de dichos efectos?
La cuestión es que mediante esta función mágica de la palabra con las imagenes vemos el mundo a través de la voluntad del otro; el cumplimiento exitoso del objetivo de la nota es precisamente la instauración de la voluntad del titiritero en la percepción de quien es persuadido por la nota. Los recursos de que se vale el medio de comunicación del que hablamos son sumamente básicos pero de una contundencia indiscutible por que, precisamente, manejan el aspecto más básico de la personalidad humana: los afectos. Este es un planteamiento elemental en el manejo de las relaciones públicas tal y como las planteaba Edward Bernays; proceder en la persuasión de la masa por lado de los aspectos más primitivos y más poderosos de los sujetos. Y dicho manejo lo encontramos tal cual en las notas de El Debate y sobre todo en las caricaturas que en ese medio se publican ya que apelan a poner los problemas sociales que tratan en sus publicaciones a nivel de las características personales de los sujetos involucrados, provocando la burda antipatía de la masa en relación con los movimientos sociales, sin más, exactamente como lo hacía El Diario de Culiacán en la nota de la que hablamos arriba. Por supuesto, estamos a favor de la libertad de expresión y creemos que el autor de los dibujos debe seguir ejerciendo su derecho, sin embargo también debemos ejercer los nuestros y argumentar, con fundamentos, contra todo manejo mediático de tan desmedida intransigencia y poca ética que observemos en los medios de comunicación como lo es en el caso de El Debate y su tristemente celebre caricaturista. Para ello mostraremos algunas caricaturas publicadas recientemente:
Vemos aquí lo que es típico en la caricatura política, abordar el sentido del humor para expresar una idea a la opinión pública, algo simple y chistoso, nada fuera de lo común en este tipo de trabajos. Lo que es de llamar la atención es el trato que El Debate, como medio de comunicación, es decir, de manera general, -con sus notas aunadas a estas caricaturas- ha realizado de las noticias relacionadas con el Movimiento #YoSoy132LosMochis y que no se a caracterizado, para nada, de manera ética. ¿Por qué? Por que simplemente no coincide con los códigos éticos de organizaciones como la International Association of Bussiness Communicators y que dice, textualmente:
"El código está basado en tres principios diferentes, pero relacionados entre sí, de la comunicación profesional que se aplican en todo el mundo."
Dichos principios son los siguientes:
La comunicación profesional es legal.
La comunicación profesional es ética.
La comunicación profesional es de buen gusto.
Posteriormente el código dice lo siguiente:
Participarán en una comunicación que no sólo es legal sino que también es ética y sensible a los valores y creencias culturales.
Participarán en una comunicación que es verdadera, exacta y justa, y que promueve el respeto y el entendimiento mutuo.
Por supuesto, los periodistas que laboran en El Debate pueden no ser miembros de la IABC, eso es irrelevante, por que a lo que tratamos de referirnos es a la práctica observada desde el punto de vista ético y para ello acudimos a documentos de la IABC que rigen la ética de las prácticas profesionales de los comunicadores que laboran adheridos a dicha asociación. Es, pues, un referente deontológico válido y a través de él podemos cuestionar el quehacer de El Debate, sobre todo en notas donde introducen INFORMACIÓN FALSA, para ilustrar sus noticias.
¿Qué pretende El Debate con semejante manejo de la información? ¿Necesita de dichos recursos para acrecentar sus ventas con noticias candentes que den de qué hablar? ¿O qué? Esto, como se puede leer, es desconcertante...
Y es también desconcertante ver caricaturas como el "hit" que observamos hace algunas semanas:
Sabemos que, por su naturaleza, la caricatura política no puede juzgarse de la misma manera que lo hacemos con las notas periodísticas, sin embargo, debemos señalar los mensajes claramente difamatorios que se utilizan en dichas creaciones artísticas con la finalidad de cuestionarnos sobre la ética de su autor así como la intencionalidad de éste ya que, como podrá observar nuestro lector, es el mismo autor de la caricatura que expusimos arriba y que sistemáticamente ha lanzado calumnias contra el movimiento, en concordancia con demás notas periodísticas.
Por supuesto esto no es nuevo ni mucho menos, el linchamiento mediático en su tiempo también fue usado contra el movimiento estudiantil del 68:
Esta fotografía fue recuperada del ejemplar de El Diario de Culiacán que circuló el día 1ro de Octubre de 1968, como fácilmente podemos inferir lo que ocurría en ese momento era un manejo de la opinión pública para lo que se avecinaba: la massacre de la plaza de las tres culturas.Tampoco es difícil darse cuenta del propósito de estas noticias; lo que se quería era justificar el uso de las fuerzas del orden en contra del movimiento estudiantil.
Las consecuencias se observaron el día 3 de Octubre del 68, la siguiente foto fue recuperada del ejemplar de esa fecha del mismo periódico que la anterior:
El sub-encabezado dice: "Soldados y estudiantes se enfrascaron en violenta balacera..." Véase el manejo mediático que se dio el día siguiente de la tragedia y que fue la culminación de toda una temporada de linchamiento mediático al movimiento, dicha temporada puede observarse y revisarse a lo largo de los diferentes números publicados del Diario de Culiacán durante el año 1968. Probablemente es ese el detalle que más nos preocupa; durante un año se realizó un trabajo de la opinión publica en el cual se preparó la representación -a través de los medios de comunicación- que se tenía del movimiento para dar una legitimación de los procedimientos represivos que acontecieron el 2 de Octubre. Por supuesto que una gran parte de la masa no fue persuadida por dichos métodos, sin embargo la aplicación de estas estrategias, como tal, son indicadores que nos van mostrando intenciones.
Bien podemos afirmar que no han sido pocas las veces en que los aparatos represivos del Estado ya se han planteado actos represivos directos contra el movimiento #YoSoy132. En estos casos podemos referirnos al ejemplo de San Salvador Atenco para situar la relación que se establece entre dichos planteamientos y el manejo mediático: durante el operativo represivo que se realizó en San Salvador Atenco se llevó a cabo, simultáneamente, un ataque mediático constante contra dicho movimiento en el cual se pedía que "el Estado actuara con contundencia" puesto que "un grupo de campesinos con machete no pueden estar burlándose cínicamente de la autoridad". Los resultados de esa jornada represiva son ya conocidos, violaciones a mujeres, golpizas, asesinato: TERRORISMO DE ESTADO.
En Atenco, como siempre, se planteaban ideas bastante arcaicas en relación con el problema que se trataba mediáticamente; los macheteros son unos sujetos que no respetan el Estado de Derecho por revoltosos, etc. Un discurso dirigido a la víscera y no al cerebro, un verbo dirigido a tocar la carne de quien le escucha con la finalidad de contrariarlo en relación con el movimiento, ¿El objetivo? Que la masa no solo acepte las medidas represivas aplicadas contra los movimientos sociales sino que las solicite como medio de solución a ciertas manifestaciones de descontento social que son la agudización de conflictos políticos y sociales.
La contemplación de las notas ofrecidas en éste texto es la contemplación de un camino que fue recorrido hace algunas décadas, situación que parece estarse dando, tal cual, en la actualidad. En ese sentido consideramos irresponsable el manejo mediático que se está dando sobre las noticias y los comentarios del movimiento #132, no solamente a nivel ético, sino a nivel de las situaciones concretas que comienzan a presentarse a nivel nacional y estatal (desaparición, golpizas y amenazas a miembros del movimiento) y en las cuales el papel de los medios juega un rol fundamental en tanto -por omisión de los hechos o por ejercer un ataque directo pero difamatorio al movimiento- favorecen ciertas condiciones que permiten los acontecimientos a los que nos referimos anteriormente.
Estamos en un periodo de fuerte tensión social y cuestiones de esta naturaleza no deben dejarse pasar sin ponerles un mínimo de atención. Hemos visto que la historia se repite, la pregunta será ¿Es que El Debate está dispuesto a jugar un papel similar en una posible tragedia que suceda en el presente? ¿Están dispuestos a llegar a las últimas consecuencias en el papel que decidan asumir frente a la situación social actual?
O
¿Están ejerciendo dicho papel por convicción ideológica o simplemente por mediocridad profesional?
Personalmente creo que por ambas sin embargo:
El tiempo nos dará respuestas...
Bien podemos afirmar que no han sido pocas las veces en que los aparatos represivos del Estado ya se han planteado actos represivos directos contra el movimiento #YoSoy132. En estos casos podemos referirnos al ejemplo de San Salvador Atenco para situar la relación que se establece entre dichos planteamientos y el manejo mediático: durante el operativo represivo que se realizó en San Salvador Atenco se llevó a cabo, simultáneamente, un ataque mediático constante contra dicho movimiento en el cual se pedía que "el Estado actuara con contundencia" puesto que "un grupo de campesinos con machete no pueden estar burlándose cínicamente de la autoridad". Los resultados de esa jornada represiva son ya conocidos, violaciones a mujeres, golpizas, asesinato: TERRORISMO DE ESTADO.
En Atenco, como siempre, se planteaban ideas bastante arcaicas en relación con el problema que se trataba mediáticamente; los macheteros son unos sujetos que no respetan el Estado de Derecho por revoltosos, etc. Un discurso dirigido a la víscera y no al cerebro, un verbo dirigido a tocar la carne de quien le escucha con la finalidad de contrariarlo en relación con el movimiento, ¿El objetivo? Que la masa no solo acepte las medidas represivas aplicadas contra los movimientos sociales sino que las solicite como medio de solución a ciertas manifestaciones de descontento social que son la agudización de conflictos políticos y sociales.
La contemplación de las notas ofrecidas en éste texto es la contemplación de un camino que fue recorrido hace algunas décadas, situación que parece estarse dando, tal cual, en la actualidad. En ese sentido consideramos irresponsable el manejo mediático que se está dando sobre las noticias y los comentarios del movimiento #132, no solamente a nivel ético, sino a nivel de las situaciones concretas que comienzan a presentarse a nivel nacional y estatal (desaparición, golpizas y amenazas a miembros del movimiento) y en las cuales el papel de los medios juega un rol fundamental en tanto -por omisión de los hechos o por ejercer un ataque directo pero difamatorio al movimiento- favorecen ciertas condiciones que permiten los acontecimientos a los que nos referimos anteriormente.
Estamos en un periodo de fuerte tensión social y cuestiones de esta naturaleza no deben dejarse pasar sin ponerles un mínimo de atención. Hemos visto que la historia se repite, la pregunta será ¿Es que El Debate está dispuesto a jugar un papel similar en una posible tragedia que suceda en el presente? ¿Están dispuestos a llegar a las últimas consecuencias en el papel que decidan asumir frente a la situación social actual?
O
¿Están ejerciendo dicho papel por convicción ideológica o simplemente por mediocridad profesional?
Personalmente creo que por ambas sin embargo:
El tiempo nos dará respuestas...
Finalmente ofrecemos una fotografía de las felicitaciones que cierto grupo que goza de amplio poder en el estado de Sinaloa dio al expresidente Díaz Ordaz después de su IV informe de gobierno: Lo calificaban de "brillante expositor" además de "patriota serio y capaz". No hay que olvidar que en dicho informe escupió el discurso que fue la antesala de la massacre y no hay que olvidar que, en estas gratas felicitaciones se condensa y se manifiesta la íntima relación que existe entre los grupos de poder más siniestros y los medios de comunicación tanto regionales como nacionales.
http://www.youtube.com/watch?v=sR39z38v4iQ
Por: Leonardo Jiménez.
[1]
Braunstein, N. (2009). Goce, un concepto
lacaniano. México. Siglo XXI editores.
[2]
Cassirer, E. (1993). El mito del estado. México.
Fondo de Cultura Económica.
saludos! #yosoy 132 =)
ResponderEliminarExcelentes fotografías, lo que se puede encontrar en una biblioteca publica dentro de la ciudad inexplorada de Culiacán
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